aprovechando
la estancia en madrid de hace dos semanas me acerqué al prado a ver la
exposición el último rafael, no tenía demasiadas expectativas con esta
muestra pues habiendo vivido en roma y visitando los museos vaticanos a menudo, me daba la sensación de que estas obras de sus 7 últimos años de carrera y la de sus
discípulos, giulio romano y gianfrancesco penni podían defraudarme un poco.
para
mi gusto la exposición es más interesante para un historiador que para
cualquier otra persona, es lo que pensé sobre todo en la sala dedicada a
las vígenes y las sagradas familias, al finalizar la sala me dió la
sensación de haber visto el mismo cuadro veinte veces, además de los
comentarios de la gente repitiendo como papagayos lo que acababan de
leer y valorando admirativamente la mano de rafael y menospreciando la
de sus alumnos me puso un poco en guardia.
por
suerte en la última sala pude ver unos retratos más personales de
rafael, de gente de su entorno, como el genial de baldessare castiglione o el autorretrato con giulio
romano, su discípulo preferido, esta parte es más disfrutable y menos
"didáctica" consiguiendo que la exposición no resulte tan dura y que salgas de la muestra contento.
rafael murió muy joven, a los 37 años, la edad que tengo ahora mismo, da mucho que pensar...
:)
ResponderEliminarlo mismo digo carlos :)
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